Auropoesía
viernes, 16 de diciembre de 2022
miércoles, 14 de diciembre de 2022
El deseo de tus ojos.
Ojos negros penetrantes
cómplices de amor,
generadores de luz
a mi alma sedienta,
de ti, de tu dulzor,
de tu sonrisa fresca.
Con tu mirar sereno,
generas confianza
alentando al vencido
insuflas nueva vida,
invitando a vivir,
regalando alegría,
gesto de generosidad,
sin resquicio vacío
en el que quepa la
palabra olvido,
solo pretendo ver
reflejado, el mirar,
el deseo de tus ojos serenos.
lunes, 12 de diciembre de 2022
Libre vuelo como pájaro
temeroso. Profundo y frío
como mar, salado y bravío
abismal en lo más hondo.
Cálido, cercano y ágil como
armónico oleaje al chocar
contra las rocas, magullada
empapada refrescada por
tu amor, por sentir que soy
libre por tenerte a ti muy cerca.
Gotas de agua ,acuoso elemento
convertido en líquido vital.
Agua salada convertida en mar
solo mar en sí, agua eres tú,
vital y etérea como el aire que
respiramos, como tú, cuando estás.
Libre como ahora siento, el batir
de las alas al volar. ¡ Libre!
miércoles, 31 de agosto de 2022
Estío
Pegada al suelo
junto al polvo del camino
queda la huella, marcada,
espaciada, poco definida,
junto a la polvareda
provocada por el tránsito
de pesadas maquinarías
de las faenas agrícolas.
En los márgenes,
algún espino verde, blanco,
espigas de cebada aisladas
sobrevivientes de la siega,
alguna que otra ginesta,
tomillos leñosos, hinojos aislados
desprovistos de sus tiernas hojas,
coronadas por florecillas cimbreadas
por su propio peso.
Las briznas de los rastrojos
se insertan dentro de la polvareda,
reflejando rayos de luz cegadora
proyectada por el reflejo del sol abrasador.
¡Ay! Cuánto cuesta mantener el ritmo,
en cuanto ascienden las cuestas.
La respiración se entrecorta,
dando paso al continuado jadeo,
produciendo, la fatiga,
llegando a la extenuación.
Y solo allá una pequeña
sombra de un almendro
de corteza tosca y seca
socavado en su raíz,
fruto de numerosas
madrigueras, habitáculos
de conejos muy abundantes
en estas tierras labriegas.
Saltan, brincan, corretean,
a través de los rastrojos,
moteándose con tonalidades:
entre grises, negros y pardos.
El calor cae como plomo
la sequedad en el aire
es manifiesta. ¡Cómo cuesta
respirar! Los labios se entre abren
y se resecan, hasta duelen.
En este estado, el caminante
vuelve sobre sus pasos,
antes de que el sol alcance el cénit
En este instante, todo es quietud.
El paisaje queda inerte,
todo un cuadro, un bodegón,
de cálida gama cromática.
Los sonidos se enmudecen,
ya no cantan las cigarras,
ni los grillos. Queda todo adormecido.
El caminante mira a su alrededor
y admira tal belleza, dura, extensa,
extremadamente seca y solitaria.
Esta es Castilla. Mi tierra
martes, 30 de agosto de 2022
Daniela
como aire puro, fresco
en su nuevo despertar
exultante, divertida
no puede haber en la vida
una mejor compañía,
que la de ella, mi florecilla.
Fragante, cariñosa
juguetona, un poco terca,
bondadosa, divertida,
bailarina, observadora,
hábil, dulce, generosa.
Todo un primor en su
floreciente despertar.
Su vida, un gran regalo
al asirla de la mano
siento volar junto a ella,
danzar en su propia magia.
Ríe por todo, lo que le gusta
y lo que su imaginación crea.
Sus primeras, palabras
intento de compartir
lo que aprende e intenta
dramatizarlo con gestos
para hacerlo compresible.
Casualidad
Miré a lo alto y te vi
lunes, 22 de agosto de 2022
Tórrido agosto
Cálidas tardes.
Fuego, ardor, desprenden
las piedras recalentadas
por el sol, a lo largo del día.
Pereza en nuestro ser.
Catarsis soporífera,
de emociones vividas.
La mente se adormece,
le cuesta despertar.
Todo alrededor, es quietud.
El aire no esparce, los olores
que mece. Pesadez y hastío.
La gente a estas horas,
desaparece, se oculta.
Es el estío, sofocante y seco
de estas bizarras tierras
de interior, de rigores
extremos, de rudeza y nobleza.
Esta, es tierra dura
castellana manchega
allá por antaño, labriega
hoy innovadora, adaptable
a cualquier ideal alcanzable.